Uno de los productos de descanso más demandados desde hace varios años seguidos es el sofá cama. Su anchura, su disposición y lo beneficiosos que son para corregir las malas posturas y los dolores de espalda los ha hecho pasar de un capricho para unos pocos a un elemento indispensable en todo salón que se precie. Su uso está cada vez más extendido, sobre todo para mantener la arraigada costumbre de la siesta, y ofrecen excelentes resultados en caso de tener que acoger a un invitado inesperado en casa o de quedarnos traspuestos por las noches durante largo rato. Dada la enorme variedad que ofrece el catálogo actual de sofás cama es indispensable contar con asesoría experta para elegir el modelo que más se ajuste a nuestro presupuesto y necesidades, y en eso podemos echarte una mano. Vamos a indicarte en qué fijarse para escoger un sofá cama de calidad y acertar de lleno con la compra.

Cómo elegir un sofá cama

Hay varios aspectos a los que hay que prestar atención a la hora de elegir un sofá cama de calidad. Uno de ellos y por lo que destacan los modelos más modernos es la esponjosidad, ya que no todos cuentan con unos cojines igual de mullidos. Esto es especialmente importante para disfrutar de la comodidad propia de los sofás cama, ya que podemos utilizarlos durante largas horas durante la noche o incluso puede disfrutar de él un invitado inesperado.

Un sofá cama cómodo debe tener dos reposabrazos mullidos y unos respaldos con la mitad del grosor que los cojines diseñados para sentarse. Son las medidas ideales que estandarizan las proporciones de uno de estos productos, algo a tener en cuenta en caso de solicitar un presupuesto para pedir un sofá cama a medida por encargo. No obstante, si deseas obtener uno personalizado, será el equipo de especialistas en descanso quienes te aconsejen sobre las medidas ideales en base a ciertos criterios, como el espacio del que dispones, las personas a las que debe dar cabida o los complementos que desees ponerle.

Un aspecto fundamental del colchón de un sofá cama es si favorece la correcta posición de la columna. Dado que lo más seguro sea que vayamos a pasar largas horas tumbados en él, debemos asegurarnos de que no es demasiado blando y de que no presenta una dureza excesiva. Estos defectos en la rigidez de la superficie del colchón del sofá cama pueden provocar lesiones vertebrales difíciles de revertir. Puedes solicitar en el momento de la compra probar el sofá cama para asegurarte de que cumple con tus necesidades y que se adapta totalmente a ti.

Tanto si tienes pensado seguir utilizando la cama para dormir por las noches como si piensas dormir en él algunos días, debes pensar que, durante el invierno, lo más seguro sea que le añadas ropa propia de cama, como sábanas, nórdicos o cojines de gran envergadura. El espacio del sofá cama debe adaptarse a estos complementos y debes asegurarte de que te proporcionan el descanso que necesitas. Un sofá cama cómodo debe contar con el espacio suficiente para ti y una persona más en caso de ser individual, ya que se presupone que algún tipo de accesorio vas a implementarle al ponerlo en casa. Esta es, sin duda, una de las ventajas de tener un sofá cama a medida, que puedes personalizar el espacio y no tienes por qué ajustarte a las dimensiones preestablecidas por los fabricantes.

Quizá esto sea un problema en las versiones plegables. Un sofá cama plegable proporciona el espacio suficiente como para descansar cómodamente, pero ven ligeramente reducidas sus dimensiones para otorgarle un aspecto un tanto minimalista, que reduce la extensión del colchón y de los reposabrazos. Tenlo en cuenta antes de optar por un modelo de sofá cama u otro.

Otras consideraciones acerca de los sofás cama

El colchón de un sofá cama es el elemento que más expuesto va a estar de este tipo de productos. Sobre él nos sentamos, apoyamos y, por qué no decirlo, incluso saltamos en los momentos de más euforia. Conviene cuidarlo, sobre todo si adoptamos el modelo de comida americana de comer con la bandeja propia en el sofá, ya que puede sufrir manchas por derrames accidentales de comida o bebidas azucaradas que resulten difíciles de eliminar. Es siempre recomendable que le añadas una funda impermeable e hidrófoba, que repela los vertidos ocasionales. De esta manera, te aseguras de tener siempre un sofá cama de calidad.

Piensa también en si va a estar expuesto a las “maldades” de los más pequeños. No lo decimos por las manchas, que también, sino por las lesiones que pueden provocar determinados añadidos como barras de madera, las aristas de los reposabrazos o cremalleras que pueden provocar rozaduras y arañazos. Si vas a encargar un sofá cama a medida, trata de solicitar que las cremalleras cierren por la cara interior y que se reduzcan al mínimo las terminaciones angulosas de los materiales, sobre todo en caso de adquirir un sofá cama plegable. Será mucho más cómodo para todos, y el pequeño no sufrirá heridas por eventuales caídas o golpes.

No es recomendable utilizar un sofá cama plegable para dormir siempre, ya que el descanso que proporcionan las camas apenas es comparable con el de un sofá cama cómodo. No obstante, el colchón de un sofá cama puede cambiarse para añadir funciones como la autorregulación de la temperatura o proporcionar una mayor transpirabilidad de la piel. Lo mismo ocurre con las fundas, así que fíjate siempre en que dispone del espacio suficiente como para añadir una sin que el espacio disponible para descansar se vea comprometido.

Dudas más habituales sobre la adquisición de un sofá cama

El sofá es el elemento más importante del salón, ya que nos proporciona un lugar para sentarnos o tumbarnos cómodamente mientras realizamos distintas actividades, como leer, ver la televisión o echar una cabezadita. Sin embargo, las dimensiones del sofá cama, pese a contar con espacio para sentarse dos y hasta tres personas, se ven modificadas en caso de querer dormir sobre él. Para que te hagas una idea, un sofá cama plegable de dos plazas solo cuenta con el espacio ideal para que duerma una persona. ¿Pueden caber más? Sí, pero en un espacio muy reducido que no resulta ser el más propicio para el descanso. Un sofá cama cómodo es aquel que ofrece un espacio más cuantioso que un sofá convencional y permite dormir sobre él con los complementos propios de una cama.

Por otro lado, en caso de que tengas un presupuesto ajustado, debes optar por un sofá cama plegable de tipo libro, que ofrece espacio más que de sobra para dormir algunas noches. A día de hoy existen modelos con infinidad de añadidos y con otros sistemas de apertura y anclaje, pero más de la mitad de los encargos para entregar un sofá cama a medida están basados en el tradicional modelo de sofá cama de tipo libro.